que vagaba entre sueños perdidos,
que predicaba en sordos desiertos,
que lloraba invisibles lágrimas.
Fina estela que se pierde en el horizonte.
Similar a una fina línea del tiempo perdido,
agotado,
irrecuperable.
Enloquece el presente, quiere huir del pasado.
(Era, que no es).
Ahora,
ya no quedan sueños, sino destinos;
no quedan sordos, sino sigilosos oyentes;
no hay invisibles lágrimas, sino dulces sonrisas.
Futuro que se pasea, implacable.
(Era, que no es).
Quizá algún día será..
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